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El Colegio de Periodistas de Chile saluda a trabajadoras y trabajadores de los medios de comunicación y a periodistas y comunicadores/as del país, con motivo del Día Internacional del Trabajador/a.
Con renovada convicción y compromiso, hacemos un llamado a fortalecer la unión de nuestro gremio para superar la precariedad laboral que nos afecta. Las últimas semanas no han sido fáciles para nuestro sector, ya que hemos tenido que enfrentar permanentes despidos masivos y arbitrarios, atropellos cotidianos a los derechos laborales y reiteradas prácticas de acoso laboral que sufren nuestras y nuestros colegas.
Por ello, hacemos llegar en este Primero de Mayo todo nuestro respaldo y solidaridad a los/las dirigentes sindicales y nos comprometemos a acompañarles en la dura cruzada de proteger los derechos laborales de trabajadoras y trabajadores de los medios de comunicación, periodistas y comunicadores/as del sector público, privado y de la sociedad civil.
Los empresarios declaran, sin pudor, sentir “pena y dolor por las medidas” que deben tomar para superar las situaciones de crisis financiera y poder hacer viable sus empresas. Sin embargo, no han tenido la franqueza y transparencia para, junto a trabajadores y trabajadoras, enfrentar estas crisis, colocándoles en total indefensión y en una incertidumbre laboral inaceptable. Porque, a fin de cuentas, estas decisiones se adoptan en un intento por proteger sus propias utilidades, lo cual casi nunca está en discusión.
Otro tanto ha estado ocurriendo en el sector público. Trabajadores/as de profesión periodista han sido desvinculados/as en diversas reparticiones públicas, tanto a nivel nacional como en regiones, y a quienes no se les podría catalogar como personas de “confianza” del gobierno anterior. Muchos/as de ellos/as han trabajado por años en algunas instituciones del Estado, cumpliendo a cabalidad y con la mayor entrega profesional, las tareas propias de sus puestos, logrados, muchas veces, a través de concurso público.
Este nivel de inseguridad en el mundo laboral de la prensa y el área de las comunicaciones en Chile, se ha tornado una costumbre y se vulnera gravemente el derecho al trabajo, la estabilidad laboral y el bienestar que merecen las familias de quienes están cumpliendo con lealtad y compromiso su labor en los medios de comunicación y en el sector público y privado.
Este 1 de Mayo exigimos para trabajadoras y trabajadores, trabajo digno, salario justo, jornada de trabajo claramente establecida y acorde, trato respetuoso, libre de discriminación y atropello, contrato seguro, ajustado a la ley y que no conlleven subterfugios que vulneren la seguridad laboral de las personas y les impidan el derecho a la sindicalización.
El Colegio de Periodistas tiene además el deber hoy de alertar sobre el modelo de externalización de funciones que se ha comenzado a instalar en algunos medios de comunicación en el país, situación que viene a ahondar y profundizar la grave precarización laboral que afecta a nuestro sector. No nos detendremos en nuestra tarea de proteger y exigir el respeto a los derechos laborales de periodistas, fotógrafos/as, productores/as, camarógrafos/as, sonidistas y a todos/as quienes hacen posible la entrega informativa y la comunicación día a día, en nuestro país.
Santiago, 1 de Mayo de 2018
Con renovada convicción y compromiso, hacemos un llamado a fortalecer la unión de nuestro gremio para superar la precariedad laboral que nos afecta. Las últimas semanas no han sido fáciles para nuestro sector, ya que hemos tenido que enfrentar permanentes despidos masivos y arbitrarios, atropellos cotidianos a los derechos laborales y reiteradas prácticas de acoso laboral que sufren nuestras y nuestros colegas.
Por ello, hacemos llegar en este Primero de Mayo todo nuestro respaldo y solidaridad a los/las dirigentes sindicales y nos comprometemos a acompañarles en la dura cruzada de proteger los derechos laborales de trabajadoras y trabajadores de los medios de comunicación, periodistas y comunicadores/as del sector público, privado y de la sociedad civil.
Los empresarios declaran, sin pudor, sentir “pena y dolor por las medidas” que deben tomar para superar las situaciones de crisis financiera y poder hacer viable sus empresas. Sin embargo, no han tenido la franqueza y transparencia para, junto a trabajadores y trabajadoras, enfrentar estas crisis, colocándoles en total indefensión y en una incertidumbre laboral inaceptable. Porque, a fin de cuentas, estas decisiones se adoptan en un intento por proteger sus propias utilidades, lo cual casi nunca está en discusión.
Otro tanto ha estado ocurriendo en el sector público. Trabajadores/as de profesión periodista han sido desvinculados/as en diversas reparticiones públicas, tanto a nivel nacional como en regiones, y a quienes no se les podría catalogar como personas de “confianza” del gobierno anterior. Muchos/as de ellos/as han trabajado por años en algunas instituciones del Estado, cumpliendo a cabalidad y con la mayor entrega profesional, las tareas propias de sus puestos, logrados, muchas veces, a través de concurso público.
Este nivel de inseguridad en el mundo laboral de la prensa y el área de las comunicaciones en Chile, se ha tornado una costumbre y se vulnera gravemente el derecho al trabajo, la estabilidad laboral y el bienestar que merecen las familias de quienes están cumpliendo con lealtad y compromiso su labor en los medios de comunicación y en el sector público y privado.
Este 1 de Mayo exigimos para trabajadoras y trabajadores, trabajo digno, salario justo, jornada de trabajo claramente establecida y acorde, trato respetuoso, libre de discriminación y atropello, contrato seguro, ajustado a la ley y que no conlleven subterfugios que vulneren la seguridad laboral de las personas y les impidan el derecho a la sindicalización.
El Colegio de Periodistas tiene además el deber hoy de alertar sobre el modelo de externalización de funciones que se ha comenzado a instalar en algunos medios de comunicación en el país, situación que viene a ahondar y profundizar la grave precarización laboral que afecta a nuestro sector. No nos detendremos en nuestra tarea de proteger y exigir el respeto a los derechos laborales de periodistas, fotógrafos/as, productores/as, camarógrafos/as, sonidistas y a todos/as quienes hacen posible la entrega informativa y la comunicación día a día, en nuestro país.
Santiago, 1 de Mayo de 2018
Creo q habría q empezar a enfrentar seriamente la propiedad de los medios,y la hegemonía de estos. Crear condiciones p que surjan nuevos medios, más allá de las redes digitales.
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